Guía de audioIstanbul Toy Museum

En una elegante villa del barrio de Göztepe, en Estambul, existe un lugar donde los recuerdos de la infancia permanecen vivos en cada rincón: el İstanbul Oyuncak Müzesi, o Museo de Juguetes de Estambul. Fundado a mediados de la década de los dos mil por Sunay Akın, conocido poeta y narrador turco, este museo único nació tras la visita de Akın a un museo de juguetes en Alemania, donde imaginó llevar una experiencia similar a su propia ciudad. Durante más de veinte años, Akın recorrió más de cuarenta países para reunir juguetes que reflejan la diversidad y riqueza de las culturas del mundo.

Sefa Gökce

La fecha de inauguración del museo no fue casual: abrió sus puertas el veintitrés de abril, coincidiendo con el Día de la Soberanía Nacional y el Día del Niño, una importante festividad nacional turca. Esta celebración rinde homenaje tanto a la independencia del país como a la esperanza depositada en las nuevas generaciones, haciendo de este día el momento ideal para que un museo dedicado a la magia del juego y la narración cobre vida.

Deniz Çataltaş

Al entrar, llama la atención la imponente estructura del edificio, una antigua residencia familiar de cuatro plantas, con una fachada blanca de madera adornada con elementos de diseño tradicional turco, similares a los que pueden verse en los barrios históricos a orillas del Bósforo. En el interior, las amplias habitaciones se comunican fluidamente entre sí, cada una restaurada y decorada con esmero para transportar a los visitantes a diferentes épocas.

Sefa Gökce

La colección del museo reúne cerca de cuatro mil juguetes, entre ellos auténticas antigüedades que datan de hace aproximadamente doscientos años. Se pueden recorrer salas temáticas: un espacio dedicado al cosmos deslumbra con cohetes y sondas espaciales en miniatura, mientras que la sección de trenes invita a subirse a un antiguo vagón y admirar locomotoras de hojalata fabricadas a principios del siglo veinte. En otro pasillo, se exhiben casas de muñecas exquisitamente decoradas, evocando épocas pasadas.

Yağız Eğe

Cada objeto tiene su propia historia. Algunos juguetes reflejan tiempos de paz y prosperidad; otros evocan épocas difíciles. En las vitrinas se pueden encontrar soldados y aviones de juguete creados durante los años convulsos en torno a la Segunda Guerra Mundial, así como figuras en miniatura de líderes mundiales. La pieza más antigua—una muñeca francesa, realizada alrededor de mil ochocientos veinte—brinda una ventana a las tradiciones infantiles europeas del siglo diecinueve.

Los jardines del museo mantienen ese toque especial al aire libre. Destacan esculturas de jirafas doradas, plateadas y bronceadas en tamaño real, hechas de concreto, que evocan leyendas locales. Cerca de ellas, aparecen personajes entrañables del folclore turco, como el ingenioso Keloğlan y el sabio Nasreddin Hoca, mezclando arte, historia y fantasía bajo el cielo estambulita.

Desde su apertura, el İstanbul Oyuncak Müzesi ha inspirado la creación de nuevos museos de juguetes en todo el país. Gracias a su combinación de nostalgia, diversidad cultural y el placer del descubrimiento, este museo invita a todos—a cualquier edad, idioma u origen—a reencontrarse con la alegría sencilla de la infancia en pleno corazón de Estambul.